Ya estamos de vuelta, un poco tristes pero con muchas cosas que contar. Vamos por partes: lo prometido es deuda así que ahí van las fotos de nuestra caminata a Enciñeira, que aconsejamos a todos que hagais alguna vez, merece la pena.
Ésta última foto está hecha desde el mirador de Os Anguieiros pero el sol ya pegaba a las 9.00 de la mañana así que, si alguno decide ir, tempranito en veranito.
Otras fotos son de las obras que realizaron en la presa y que, afortunadamente, ya acabaron. El fin de semana pasado ya subieron el río y por fin nos pudimos bañar tranquilamente aunque nosotros ya no esperamos a que lo subieran. Este año fuímos los primeros pero después vinieron la Jacoba y el Amadeo (que no lo vimos porque sólo vino parte del fin de semana en moto desde Barcelona) y Raúl. Suponemos que esta semana ya lo "estrenarían" mi madre, Mercedes, Miguel o Dori. No lo sabemos.
Realmente en la fotos no se ve el rio del todo bajo porque hubo momentos en que se veía toda una casa que estaba sumergida, con los huecos de la puerta y las ventanas. Daba un poco de respeto pensar que allí pudo vivir gente y que ahora se encuentra en el fondo del agua ...
Aún nos queda por contar las andainas que hicimos en A Veiga y Manzaneda (éstas organizadas) y nuestra excursión a Las Médulas (que no las conocíamos) y la ruta donde nace el agua que bebemos en Casares... Muchas cosas que ahora mismo no nos da tiempo, pero todo se andará.
Estuvimos muy bien estos quince días en Casares, como veis hay bastantes cosas que hacer. Y hay gente que aún nos pregunta si no nos aburrimos ... ¡¡ Qué tonterías!!. No conocen CASARES.
Biquiños para todos, nos vemos en verano.
