CASAREÑOS EN LA EMIGRACIÓN: 21/3/21

jueves, 25 de marzo de 2021

HISTORIA DE UNA FOTOGRAFÍA (PARTE I).

Tiene ya unos 65 años, sin duda la foto más antigua que tenemos relacionada con Casares. Es una imagen que le gusta a mucha gente: a nosotros porque vemos a nuestros padres cuando eran pequeños y a ellos porque les trae recuerdos de su infancia, una niñez llena de privaciones y trabajos pero que sin embargo fueron años felices. Algo más hemos descubierto sobre la historia de esta foto en blanco y negro que nos ha contado mi madre aunque nos gustaría saber qué recuerdos guardan los otros niños (hoy adultos) que también estaban allí. Vamos a empezar con el relato de mi madre y animamos a los demás a que nos contéis vuestras lembranzas.

1.LEO; 2.AMPARO (MI MADRE); 3.MARU; 4.MARINA; 5.ROSA; 6.MILOCHA; 7.Mª CARMEN; 8.LOLI; 9.JULITO; 10.ILDA (MAESTRA); 11.JOSE MARI; 12.GONZALO; 13.KIKE; 14.ÁNGEL; 15.MIGUEL; 16.LUIS; 17.BASILIO.

“La foto se hizo en el año 1956/1957, cuando tenía unos ocho o nueve años. No sé quién hizo la foto ni quién la pagó pero creo que la idea fue de la maestra que estaba entonces, Doña Ilda Losada. Está hecha donde estaba la escuela y la bandera que aparece la teníamos dentro de la clase junto con un retrato de Franco. Yo empecé y acabé la escuela con Doña Ilda, que había venido al jubilarse el anterior maestro, Don Adelmo. La maestra era una mujer joven, soltera, no tenía hijos y era de Boimorto, una aldea de Monforte. Mientras estuvo en Casares vivió en casa de la Jacoba, de Remedios (la madre de Camilo) y de Idelisa. Era muy dura en los castigos (nos pegaba en las uñas, nos ponía de cara a la pared con los brazos abiertos cargados de libros y a Víctor le llegó a meter la cabeza en un hormiguero). Pero también la recuerdo como una mujer cariñosa. Fue la madrina de Marujita (hermana de Ricardo y Ramón), la hija de Florindo y Amelia, una niña que sufrió muchas cosas, mucho, demasiado. Cuando Doña Ilda ya no estaba aquí me escribió varias cartas y hasta mandaba algún paquete para Marujita. Estuvo bastante tiempo de maestra en Casares (yo empecé a los seis y acabé con catorce años, todos con ella) y se llevaba muy bien con el profesor que estaba en aquel tiempo en Navea. Nunca nos volvieron a hacer una foto a los alumnos de la escuela (o por lo menos yo no lo recuerdo) y pienso que en ésta faltan más niños: los hermanos de Kike y de Luis, por ejemplo. Cómo conseguí la foto no lo puedo decir con seguridad pero creo que nos dieron una copia a cada uno. Han pasado muchos años y de todo no me acuerdo. Era una niña”.

AQUÍ ERA ONDE ESTABA A ESCOLA E FORA ONDE
SE FIXO A FOTO. CASARES.

ANTIGOS PUPITRES DA ESCOLA
ABANDONADOS NUNHA CASA
DE CASARES.

LIBRO CO QUE ESTUDABA
A MIÑA NAI EN CASARES.

LIBRO CO QUE ESTUDABAN OS NENOS NA ESCOLA
EN CASARES.

ANTIGOS PUPITRES DA ESCOLA DE CASARES.

PUPITRES ABANDONADOS DA ANTIGA
ESCOLA DE CASARES.

Por lo demás este fin de semana pasado pudimos comprobar que la primavera ya llegó a Casares: buen tiempo pero aún con frío por las noches y a las mañanas. Y con la primavera también llega la nueva temporada de desbroce, algo que no nos gusta nada pero necesario si queremos llegar a nuestra casa. Porque aquí nadie cuida nada pero todo tiene dueño: fincas, árboles, casas… Y cada vez quedan menos caminos para ir por el pueblo, muros y casas caídas que no dejan pasar o suponen un peligro desde hace meses. Al final habrá que tomar otras medidas porque por las buenas nada se hace (al menos en este pueblo).