No tenemos perdón, lo sabemos. Llevamos dos meses con el blog abandonado pero es que el final de las vacaciones y por lo tanto, del verano, nos “ha pillado” sin ganas.
Hace casi un mes que volvimos de nuestra segunda quincena de vacaciones (por tierras malagueñas) y ese tiempo es el que también llevamos sin ir a Casares. Lo habíamos dejado con el final de la vendimia, Santiago, Milocha, Kike, Miguel, Dori, mi madre … vamos, que se cansaron de trabajar, como siempre, pero satisfechos, un año más, de que aún puedan realizar algo que llevan haciendo toda una vida. Y parece que se va arreglando alguna casa más, la de los padres de Thais quedó muy bien, parece otra.
Mi madre se vino hace quince días para Viveiro, el frío había llegado por tierras casareñas y las noches ya no se pasaban sin encender la cocina de leña.
Y la lluvia, y las hojas amarillas, y las clases de inglés y de guitarra, y madrugar y … parece que el verano se fue hace mucho tiempo.
Hacemos memoria y el agosto se pasó muy rápido en Casares: volvimos a hacer una cena todo el pueblo, la pachanga se jugó como cada año aunque sin Gerardo (sin “el capi” no es lo mismo, el año que viene no te libras) y con Use haciendo de Pepe y rompiéndose el tobillo (desde aquí un fuerte abrazo, esperamos que ya te sacaran el clavo), hasta se hizo un triatlón (es que los de Madrid no tienen techo). El río estuvo concurrido como siempre y hay una nueva generación que cuando nos demos cuenta, ya nos mandan. Y como no, las noches, esas noches en Casares, de cubatas, de algún pitillo, de cartas, de confidencias, de sueños, de planes que no tienen precio. Sí, sí, son mágicas. Y además este año hubo una exclusiva, sí, sí, que RAUL Y DIANA se casan, después de “llevar aguantándose ya unos cuantos años”.
Ahora todo eso se siente que queda ya muy lejos. Jose Maria se nos ha ido para Suecia (esperamos que todo le vaya bien, menuda mierda de país que tenemos que volver a emigrar), regresaremos un fin de semana y todo estará desierto, vacío (no sabemos si los mayores van a pasar todo el invierno allí) y Laura perdió “el lápiz” con las fotos del verano y aún parece que te olvidas más de todo lo vivido.
Iremos a buscar las castañas. Llamaremos a Dani y Pam (que son los que más se acercan), tomaremos los cubatas al lado de la estufa de leña, hablaremos del Depor, de política, de Casares, de vosotros …
Y es que el otoño ha vuelto. Con toda su tristeza, con un año por delante para otro verano, para volver a vernos, otra vez …. EN CASARES.
PD. Os dejamos un resumen del resultado obtenido en Ribas do Sil y alrededores de las elecciones celebradas el pasado mes. Una pena los resultados, una decepción, un fracaso, así nos va en Galicia, tenemos lo que nos merecemos (aunque yo no soy gallego y Laura ha solicitado ser apátrida).
P.D. Os pedimos que nos mandéis las fotos que tengáis del verano, las del triatlón, del la cena, de las noches… la culpa la tiene Laura, que siempre hace las fotos y luego las pierde.
año que viene.
no han podido venir este año.
este aún no hemos ido a por ellas.
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